Madre de ocho hijos, entre ellos Miguel, que nació con una lesión cerebral y gracias a él, fundó junto a su marido, Gregorio Codolá, la Fundación Nemo.

A partir del 2012, el nacimiento de Miguel desencadena en ella otro nuevo nacimiento. Su vida da un giro de 180 grados: empieza un camino de investigación y formaciones.

En 2013 cursó, junto con Bertín Osborne, el programa de “Estimulación Neurológica” de Doman International Institute, el cual supuso un primer paso para trabajar la estimulación cognitiva y entender más el funcionamiento del cerebro. La parte física de la formación no le resultó tan de su agrado, por lo que continuó con su búsqueda.

En 2014, realizó la formación de “Advanced Biomechanical Rehabilitation” (ABR), donde se trabajaba directamente en el tejido fascial y la matriz extracelular y lograba reforzarlo. Sin embargo, la cantidad de horas necesarias para conseguir resultados no era viable, a su parecer, para compaginarlo con la convivencia familiar de un núcleo numeroso.

En 2015, inició una formación mucho más extensa en Las Vegas (EEUU): “Anat Baniel Method Professional Training”. Aquí cambió todo. Una nueva perspectiva marcada por el ritmo neurológico de cada individuo donde el reloj no importaba. Sólo importaba la particularidad de cada sistema nervioso. Una vez adquirida la atención se producía el aprendizaje. Inicia el crecimiento de su hijo Miguel y con ello, las oportunidades de aprender.

En 2016, tuvo la suerte de poder combinar dos formaciones más con Masgutova Foundation: “MNRI Tactile System Integration” y “MNRI Reflejos Arquetípicos”, que aportaron gran valor en el aprendizaje de la integración de los reflejos primitivos en los niños que no les sucede de forma natural como consecuencia de sus dificultades en el desarrollo.

En 2017, continúa su aprendizaje con Anat Baniel en San Rafael, California, con el “Masters Children with Special Needs”, donde se especializó en la implementación de los “nine essentials” en la edad infantil y juvenil. Ésto le permitió tratar a otros niños con dificultades en su desarrollo.

En 2018, completa su educación con “MNRI Facial Reflex Integration”, haciendo énfasis en los reflejos orales y faciales para impulsar la comunicación y la deglución.

En 2019, inició un “Master en Marketing Digital” y una formación de “VideoMaker” para impulsar su labor por hacer llegar la visión más bonita y colorida de la diversidad funcional.

Desde la creación de a Fundación Nemo se ha centrado en visibilizar la neurodiversidad positivamente, en promover la inclusión familiar, educativa y social a través de las RRSS y las plataformas digitales, siempre desde la filosofía del entusiasmo y de la oportunidad.